
Balance operacional 2025 del Ejército Nacional
El Ejército Nacional presenta el balance operacional correspondiente al año 2025, un periodo marcado por operaciones importantes, fortalecimiento de capacidades estratégicas y la ejecución de la Acción Integral sostenida en los territorios; labores enmarcadas en el Plan de Campaña Ayacucho Plus, cuyo propósito fundamental es proteger la vida, salvaguardar la gobernabilidad, fortalecer el control territorial y debilitar de manera efectiva las capacidades armadas y financieras de los grupos criminales.
Operaciones Importantes
Los resultados institucionales logrados en este año que culmina se enmarcan en el Plan de Campaña Ayacucho Plus, con un propósito claramente enfocado en proteger a los colombianos en todos los rincones del país, proveer condiciones de seguridad en cada territorio y contrarrestar el accionar delictivo de grupos armados ilegales, afectando sus capacidades armadas y financieras. Bajo este plan se han realizado importantes operaciones a lo largo y ancho de Colombia, entre ellas se destacan seis estrategias militares decisivas desarrolladas durante el año: Catatumbo, Perseo, Escudo del Norte, Cordillera, Ezequiel y Sur de Bolívar, cada una diseñada de acuerdo con la realidad y dinámicas del territorio.
En la Operación Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander, el Ejército Nacional avanzó de manera sostenida en cuatro fases sucesivas. En la fase humanitaria, se priorizó la protección de la población civil, logrando la evacuación de 3633 personas, la atención de 87.438 desplazados y la entrega de 352,5
toneladas de ayudas humanitarias. Posteriormente, durante la fase de ocupación y despliegue ofensivo, se consolidó la presencia institucional con 10.576 soldados desplegados, lo que permitió afectar de manera directa las estructuras criminales con 376 neutralizaciones, entre capturas, desmovilizaciones y menores recuperados, así como la incautación de más de 62.000 municiones, 2836 artefactos explosivos y material de guerra.
De manera paralela, se propinó un golpe estructural a la cadena de valor del narcotráfico, con la incautación de 39.271 kilogramos de clorhidrato de cocaína y cocaína en proceso, la destrucción de 77 laboratorios de clorhidrato de cocaína y 357 laboratorios de pasta base, la incautación de más de 531.000 galones de insumos líquidos y 227.694 kilogramos de insumos sólidos, lo que representó una afectación económica superior a los 208.135 millones de pesos a las economías ilegales.
En una tercera fase de articulación interinstitucional, se fortaleció la acción integral mediante 341.640 cuñas radiales, 108.000 volantes y acciones orientadas a recuperar la movilidad y debilitar estructuras financieras criminales. Finalmente, en la fase de estabilización, estas acciones permitieron avanzar hacia el retorno progresivo a la normalidad, fortalecer la confianza ciudadana y consolidar el control territorial en una de las regiones más complejas del país.
En la Operación Perseo, desarrollada en el sur del Cauca, el Ejército Nacional recuperó el control del corregimiento de El Plateado y afectó al Frente Carlos Patiño, mediante un esfuerzo ofensivo sostenido que permitió el sometimiento a la justicia de su principal cabecilla, alias Kevin, y de su segundo cabecilla, alias Giovanny. Esta operación dejó como resultado 53 afectaciones directas al enemigo, entre sometidos, capturas y muertes en desarrollo de operaciones militares.
De igual forma, se afectó su capacidad criminal mediante la incautación de más de 290.000 municiones, 23 armas largas, 19 armas cortas, 223 granadas y 705 detonadores, además de la destrucción de 429 artefactos explosivos improvisados y 363 medios de lanzamiento. En el ámbito de la amenaza aérea ilícita, se detectaron 1.456 drones, de los cuales 579 fueron inhibidos, reduciendo de forma sustancial la capacidad de observación y ataque de estas estructuras terroristas.
En la Operación Cordillera, desarrollada en el departamento de Nariño, el Ejército Nacional recuperó el control del Cerro Negro, punto estratégico empleado por estructuras criminales para comunicaciones, observación y coordinación de acciones terroristas, y bloqueó corredores de movilidad ilegal, afectando de manera directa las capacidades criminales de estructuras como Franco Benavides, Urías Rondón y Comuneros del Sur.
Como resultado de este esfuerzo operacional, se registraron 45 afectaciones al enemigo, entre 35 capturas, 8 sometimientos a la justicia y 2 muertes en desarrollo de operaciones militares, con lo que se debilitaron sus redes de mando y control. De igual forma, se incautó material de guerra consistente en 17 armas de largo alcance, 22 armas cortas, más de 20.000 municiones y 39 granadas,
además de la neutralización de 184 artefactos explosivos improvisados y la incautación de insumos explosivos y detonadores. En el componente de economías ilícitas, se afectó el narcotráfico con la incautación de 397 kilogramos de cocaína, 67,36 kilogramos de marihuana, 19,5 kilogramos de pasta base de coca, la destrucción de 2 laboratorios y la incautación de más de 17.700 kilogramos de insumos sólidos y 7.700 galones de insumos líquidos, consolidando el control territorial y reduciendo de manera significativa la capacidad logística y financiera de estas estructuras armadas.
La Operación Escudo del Norte permitió fortalecer el control territorial en el norte del Cauca y sur del Valle del Cauca, concentrando capacidades para cerrar corredores ilegales y debilitar al GAO-r Jaime Martínez, especialmente en el municipio de Jamundí.
Con Ezequiel, operación militar desplegada en Bogotá, Cundinamarca, Huila y Tolima, se contuvo el avance de estructuras de la facción de Mordisco, como la de Calarcá, con lo que se protegió el centro del poder nacional y zonas estratégicas.
Por último, en el sur de Bolívar, el Ejército Nacional activó la Brigada N.° 19 y la Fuerza de Despliegue Rápido N.° 9 (FUDRA 9), con el propósito de proteger a la población civil y salvaguardar bienes estratégicos del Estado frente a las amenazas del ELN, el Clan del Golfo y las disidencias. Este despliegue permitió contener y mitigar de manera contundente las confrontaciones armadas derivadas de la disputa por la minería ilegal, reflejándose en 82 capturas, 40 sometimientos, la recuperación de 4 menores, y la incautación de 49 armas cortas, 21 armas largas, 153 explosivos, 74 artefactos explosivos improvisados y más de 6.300 municiones.
De manera complementaria, se afectaron las economías ilícitas con la incautación de más de 1,5 toneladas de cocaína, 9,8 kilogramos de pasta base, 569.546 galones de insumos líquidos, 728.616 kilogramos de insumos sólidos y 25.838 galones de combustibles, debilitando de forma directa la capacidad financiera de estas estructuras criminales y fortaleciendo el control territorial en una región estratégica para el país.
Fortalecimiento de capacidades
En 2025 culminó la transformación operacional del Ejército Nacional con la activación de 12 Fuerzas de Despliegue Rápido (FUDRA), asignadas como esfuerzo principal a las divisiones del Ejército para desarrollar operaciones decisivas.
A estas capacidades se sumó la activación del Batallón de Aeronaves no Tripuladas (BANOT), orientado a fortalecer la inteligencia, vigilancia, reconocimiento y contramedidas electrónicas frente al uso criminal de drones, así como el Batallón de Ingenieros de Ferrocarrileros (BIFER N.° 56), encargado del mantenimiento y rehabilitación de la red férrea nacional para mejorar la movilidad de la población y de las tropas.
Se fortaleció la lucha contra el secuestro y la extorsión con la creación de dos nuevos grupos Gaula Militar en el Magdalena Medio (Barrancabermeja) y Oriente colombiano (Puerto Carreño, Vichada), alcanzando un total de 28 grupos Gaula Militares, fortaleciendo la lucha antiextorsión y secuestro que tanto afecta a la sociedad colombiana.
Este esfuerzo se articuló con el desarrollo del liderazgo institucional mediante la creación del Centro de Liderazgo del Ejército y la instauración de la Cátedra Francisco José de Caldas, enfocada en la formación en liderazgo militar, ética y carácter para los líderes de nuestra institución.
Golpe a las economías ilícitas y debilitamiento de los GAO
Como resultado del cumplimiento del Objetivo Estratégico N.° 2 del Plan Ayacucho Plus, enfocado en debilitar integralmente la amenaza, durante el 2025 se lograron impactos importantes sobre las economías ilícitas. Se logró la incautación de 111.593 kg de cocaína (70 % más frente al 2024), 14.855 kg de pasta base (10 % más) y 107.286 kg de marihuana. La destrucción de 182 laboratorios de clorhidrato (49 % más) y 2323 laboratorios de pasta base.
Respecto a la extracción ilegal minera, se realizaron 889 capturas (51 % más frente al 2024), se incautaron 1068 equipos de maquinaria amarilla (99 % más), se intervinieron 294 socavones o minas a cielo abierto empleadas para extraer ilícitamente minerales como el oro y se realizó la inutilización de 504 dragas (54 % más), lo que afecta de manera directa la logística criminal que impacta en gran medida los ecosistemas naturales colombianos.
En protección de la libertad personal, acciones ofensivas adelantadas por los grupos Gaula, se efectuaron 1.020 capturas por extorsión y secuestro, se liberaron a 105 personas y se rescataron 175 ciudadanos, con un incremento del 230 % sobre la efectividad operacional, lo que refleja una acción decidida en defensa de la vida.
En el debilitamiento consolidado de los grupos armados organizados residuales (GAO-r), (GAO) ELN y Clan del Golfo y los grupos de delincuencia organizada (GDO), se logró la recuperación de 402 menores, 682 sometimientos a la justicia, 3.409 capturas, 261 muertes en desarrollo de operaciones y 60 presentaciones voluntarias, reduciendo de manera significativa su capacidad de daño.
Protección de la vida
El Ejército Nacional alcanzó en 2025 la mayor incautación de armamento de los últimos diez años: 916 armas largas (41 % más frente al 2024), 2.320 armas cortas, 63 armas de acompañamiento (142 % más) y 738.282 municiones (136 % más).
Sobre la guerra de minas que libran las tropas, se neutralizaron 5972 minas antipersonal (7 % más frente al 2024), se incautaron 22.192 kg de explosivos (89 % más), además de 4.747 artefactos explosivos y 342 medios de lanzamiento, evitando su uso contra comunidades, infraestructura y las unidades militares.
Ingenieros Militares y Acción Integral, presencia sostenible del Estado
Los Ingenieros Militares son fundamentales para abrir paso al Estado en los territorios. Su esfuerzo durante 2025 permitió la instalación de 4 puentes militares (San Luis, Tolima; El Plateado, Cauca, y dos en Tierralta, Córdoba). La importante labor que adelantan facilitará la construcción de 14 más que se encuentran actualmente en proceso.
Sobre las labores de Desminado Humanitario, se lograron grandes avances en cuatro municipios y zonas priorizadas, (Villanueva y Jagua del Pilar, en La Guajira; Agustín Codazzi, Cesar, y San Juan de Arama, Meta), finalizando las tareas de rastreo, ubicación y destrucción de artefactos explosivos, lo que lleva a su declaratoria como territorios libres de minas antipersonal.
Además, lo soldados desminadores avanzan con 2 municipios más finalizados y en proceso de entrega, (Barrancominas, Guainía, y Zona 2, San Juan de Arama, Meta), interviniendo 284.994 metros cuadrados y reduciendo riesgos directos para la población civil.
Así mismo, se construyeron más de 800 metros de pavimento en la vía Tibú-La Gabarra, impulsando la conectividad en Catatumbo y se desarrolló el mantenimiento de 4,36 kilómetros de vías terciarias, lo que mejora la conectividad y la seguridad en regiones estratégicas del país.
En el marco del Plan Guajira, se suministraron más de 14 millones de litros de agua potable, se construyeron 11 jagüeyes, se mantuvieron 9 pozos, se adecuaron 12,2 km de vías y se entregaron 770,8 toneladas de ayuda humanitaria, acciones que día a día mejoran la calidad de vida de las comunidades indígenas del norte del país.
La Acción Integral, como esfuerzo no armado orientado a transformar las condiciones de vida y fortalecer la confianza institucional en los territorios, desarrolló 9.737 actividades a nivel nacional, que beneficiaron directamente a más de 9 millones de personas. Durante este despliegue, se realizaron más de 5 millones de entregas de apoyo humanitario y social, se desarrollaron 170 proyectos productivos y de infraestructura, y se lideraron 164 jornadas de apoyo al desarrollo. De manera complementaria, las unidades comprometidas adelantaron 946 jornadas ambientales, consolidando una intervención integral que impacta el bienestar, la sostenibilidad y la gobernabilidad en las comunidades.
En educación y prevención del reclutamiento, se consolidó EcoKids Radio, novedosa iniciativa desarrollada en varias regiones del país que usa la radio para enseñar inglés a niños y jóvenes en zonas rurales. En el marco de esta estrategia institucional se entregaron 1.550 computadores, contribuyendo a la prevención del reclutamiento de niñas, niños y adolescentes.
En 2025 se modernizó completamente el sistema de incorporación del Ejército Nacional, hoy interoperable con la Registraduría y el Sistema de Información para la Administración del Talento Humano (SIATH), lo que permite registrar más de 32.000 ciudadanos e incorporar 23.000 nuevos soldados, con procesos más ágiles, transparentes y dignos.
Se fortaleció de manera histórica la inclusión de la mujer militar, con la incorporación de 101 aspirantes en la Escuela Militar de Cadetes (ESMIC); 208 en la Escuela Militar de Suboficiales (EMSUB) y 6329 mujeres al servicio militar voluntario. Por primera vez, 42 mujeres de Arma ascendieron al grado de mayor, consolidando su liderazgo y profesionalismo. La participación femenina con la presencia de estas oficiales superiores estará presente en las áreas de Inteligencia, Logística y Comunicaciones, fortaleciendo la toma de decisiones y la planificación estratégica.
Adicionalmente, se incorporaron 5673 nuevos soldados profesionales, quienes fortalecieron el desarrollo de las operaciones militares en diferentes regiones del país.
Finalmente, el Ejército Nacional expresa su gratitud a los más de 180.000 hombres y mujeres que integran la Fuerza, y rinde homenaje a los 96 militares que fueron asesinados en cumplimiento del deber durante 2025, cuyo sacrificio reafirma el compromiso inquebrantable con la seguridad, la estabilidad y la vida de los colombianos.