Ibagué, Tunja y Sogamoso se unen en una voz por el llanero Alirio Barrera, el numero dos del Centro Democrático
Con multitudinarias reuniones en el Tolima y Boyacá, el exgobernador de Casanare y ex precandidato presidencial sigue llegando al corazón de los colombianos.
A pesar de la gran acogida que Alirio sigue teniendo en el país, el llanero pide a las comunidades no caer en triunfalismos, por el contrario pide encarecidamente todo el respaldo para la recta final en esta campaña por el Senado de la República.
Con mucho fervor se vivió la visita de Alirio Barrera a Ibagué, donde, para sorpresa de muchos, hubo gran acogida por parte de campesinos, caballistas, empresarios, ganaderos, comerciantes y líderes se unieron para decirle a Colombia “apoyamos al del sombrero porque es de los nuestros”.
Por otra parte, la convocatoria lograda por el número dos del Centro Democrático al Senado de la República resultó supremamente exitosa. En una gira en la que visitó varios municipios, pero en concentración especial en Tunja y Sogamoso, Barrera recordó que su misión en Boyacá no ha sido de ahora, sino de tiempo atrás.
Sobre su gestión en asuntos de desarrollo vial, Alirio dijo que “Cuando estuve de gobernador trabajé para beneficiar a toda la región, por ejemplo, quedó listo en el Pacto Bicentenario la vía que va de Nunchía Morcote, Pisba, Paya”, pero además recordó que ya está en proceso “la vía Vadohondo, Labranzagrande, Yopal; serán cinco vías las que conectarán a Boyacá con Casanare” dijo.
Barrera, con el 2 al Senado por el Centro Democrático recordó que “El alcalde de Sogamoso puede salir a decir si es mentira que antes de campaña yo mismo lo llevé al DNP, donde logramos la gestión del anillo vial para salir de Tibasosa al Crucero, para evitar entrar a Sogamoso, y junto el presidente del Senado y el mismo alcalde, en su momento antes de campaña, estuvimos en mi casa e impulsamos el proyecto para que la nación destine recursos a una doblecalzada Aguazul -Sogamso”.
Frente a desarrollo económico, Alirio se comprometió en impulsar un proyecto para la indistrialización del campo, para que de esa manera, los campesinos puedan ser quienes aprovecen los subproductos.
“Acá mismo vimos gente que cultiva pera, que cultiva manzana, normalmente una canastilla que vale 45 mil pesos, pero cuando hay cosecha se las llegan a pagar hasta en 7 mil pesos, porque no hay quién vigile la estabilidad de precios, y entonces el comisionista se queda con la ganancia del productor. Los insumos por las nubes, quebrando a las familias campesinas” indicó Barrera.