Mitos sobre moretones en las piernas

Durante generaciones, los moretones que aparecen sin un golpe evidente han sido motivo de superstición y curiosidad. En muchos lugares se decía que eran señales “de brujas”, presencias o energías, más aún, en temporada de octubre, cuando los mitos y leyendas se incrementan en la población. Sin embargo, la medicina moderna ha demostrado que estos hematomas, también conocidos como equimosis, tienen causas fisiológicas asociadas a la circulación, la coagulación y la fragilidad capilar, y no a factores sobrenaturales.

El doctor Alberto Muñoz Hoyos, especialista en cirugía vascular y endovascular, aclara lo que sucede en realidad, “los morados o equimosis se producen cuando hay una ruptura de pequeños vasos sanguíneos, lo que genera un leve sangrado bajo la piel. Muchas veces las personas no recuerdan el golpe porque fue tan leve que no lo notaron, pero eso no significa que tenga un origen místico o sobrenatural”.

Según el especialista, la fragilidad capilar es una de las causas más frecuentes. “Cuando los vasos son muy frágiles, incluso un roce o presión mínima puede provocar la aparición de un morado. Esto puede presentarse en personas con deficiencia de vitaminas C y K, en quienes tienen trastornos de coagulación o en quienes toman medicamentos que afectan las plaquetas o la coagulación”, explica Muñoz Hoyos.

Los factores nutricionales son determinantes. Una dieta deficiente en frutas, verduras y antioxidantes puede debilitar las paredes de los vasos. La vitamina C ayuda a mantener el colágeno que da soporte a los capilares, mientras que la vitamina K participa en la coagulación. Su ausencia puede traducirse en una piel más propensa a hematomas.

“El consumo adecuado de cítricos, vegetales verdes y alimentos ricos en bioflavonoides es esencial para conservar la resistencia vascular”, recomienda el doctor Alberto Muñoz Hoyos, director científico de la Clínica Vascular de Bogotá.

Cuándo consultar al médico

No todos los morados son motivo de alarma, pero cuando se presentan de forma frecuente o sin causa aparente, pueden ser un signo de que algo no funciona bien en el sistema circulatorio o en la sangre.

“Si los moretones aparecen con frecuencia, son grandes o se acompañan de sangrados por encías, nariz o menstruaciones abundantes, es importante acudir al médico para hacer exámenes de coagulación y descartar enfermedades hematológicas”, precisa el especialista.

Las pruebas médicas como el cuadro hemático y los tiempos de coagulación permiten identificar alteraciones en las plaquetas o en los factores de coagulación, que pueden derivar en trastornos más graves si no se detectan a tiempo.

Adultos mayores, embarazadas y niños

Los adultos mayores son uno de los grupos más propensos. Con la edad, la piel pierde grosor, los vasos se vuelven más frágiles y la circulación se hace más lenta.
“Por encima de los 70 años, cerca del 20% de las personas puede tener enfermedad arterial o insuficiencia venosa, lo que explica el cambio de coloración, la aparición de manchas o heridas de difícil cicatrización”, señala el médico consultado.

En el caso de las mujeres embarazadas, los hematomas pueden aparecer en las piernas o el abdomen, especialmente si se aplican medicamentos anticoagulantes.
“Es importante que las embarazadas no se automediquen con aspirina o anticoagulantes. Estos fármacos, si no están indicados por el médico, pueden hacer que la sangre se vuelva demasiado ‘liviana’ y aumentar el riesgo de sangrados o hemorragias”, advierte el cirujano vascular.

El especialista también alertó sobre el consumo de aspirina sin supervisión médica. “Mucha gente la toma porque cree que previene infartos, pero en personas mayores o sin indicación profesional puede causar sangrados graves o incluso hemorragias cerebrales”, afirmó.

En los niños, los morados son frecuentes por caídas o juegos. No obstante, el especialista advirtió que también deben observarse con cuidado. “Si aparecen hematomas grandes, repetidos o en lugares poco comunes, se debe descartar un trastorno de coagulación o, en casos más graves, situaciones de maltrato infantil. Hemos tenido casos donde los moretones eran señales de violencia, no de juegos”, explicó Muñoz Hoyos.

Derribar mitos y fortalecer la salud

El doctor Muñoz recordó que las creencias sobre “brujas” y “apariciones” que dejaban marcas en la piel tienen raíces coloniales. “En regiones como Tlaxcala, México, se pensaba que las personas amanecían con morados porque las brujas los visitaban por la noche. Hoy sabemos que todo tiene una explicación médica”, afirma.

Los mitos alrededor de los hematomas deben reemplazarse por información médica confiable. Mantener una dieta equilibrada, hidratarse, no automedicarse y acudir al médico ante signos inusuales son medidas que pueden prevenir complicaciones graves.